Saber exactamente qué se busca o qué se hace en la vida tiende a ser difícil… Sabemos que perseguimos un sueño, aunque a veces no tengamos muy claro cuál es; Sabemos que queremos ser felices, aunque no sepamos qué necesitamos para serlo.
Todo el camino, por si no es ya lo suficientemente difícil, se complica más cuando nos topamos con algunos tipos de personas, que nos van "metiendo zancadilla".
Hablemos de un par de ellos.
- El Desconfiado. Este tipo es un poco gracioso, ya que se caracteriza por no saber tenerle confianza a las personas que lo rodean, pero que, irónicamente, SÍ cree todo lo negativo, todos los chismes y todo lo que, al final, nos perjudica.
- El/La Boca Floja. Estos son los que no saben controlar lo que dicen, hablando de todos con todos, sin saber si lo que dicen es cierto o no. Su necesidad de hablar de los demás siempre es más fuerte.
- El Amigo Falso. Prometen y juran amistad y comprensión incondicional, pero a la primera oportunidad, buscan cómo hacerte mierda. (Estos son los peores, en mi opinión).
- El Villano. Este personaje no tiene un sentido de humanidad realmente, buscar afectar a quién pueda sin razón alguna, más que alimentar su ego y sentirse, de alguna forma, más poderoso.
- El conveniente. Sabemos que cada vez que nos buscan es porque necesitan algo y luego de obtenerlo, desaparecen de nuevo.
- Uno Mismo. ¿Cuántas veces nos hemos dicho a nosotros mismos que no podemos hacer algo, que nuestros sueños son muy grandes, que nuestras metas son imposibles de alcanzar, que nuestro valor es menor al de los demás?
Cada uno de estos tipos, no nos impiden vivir exactamente, pero nos hacen la existencia un poco más difícil. Sin embargo, son necesarios para crearnos carácter, para que evaluemos cuánto realmente vamos a permitir que nos afecte la opinión de alguien más, para reconocer a las amistades verdaderas basándonos en sus acciones y actitudes, pero más que nada, a no perder la fe en nosotros mismos, a mejorar nuestra opinión de nosotros, nuestros sueños y nuestras metas.
