sábado, 7 de octubre de 2017

30 cosas que aprendí a mis 30 años

Como ustedes saben, y por si no sabían pues les cuento, tuve mucha ansiedad por cumplir los tan temidos 30 años y hasta repetía constantemente que estaba pasando por la "Crisis de los 30".

Moría del miedo de decir "tengo 30 años y soy un fracaso" o "ya llegué a los 30 años y no he cumplido las metas que me tenía planteadas", tenía miedo de decir "ya estoy muy vieja para esto", tenía miedo, realmente, de las responsabilidades que sabía que vendrían con la edad. 

El día de mi cumpleaños, alguien me preguntó si haría una entrada sobre los 30 años y yo muy segura le dije que no, creo que seguía con "crisis" en la mente o algo por el estilo.

Pero luego de ese día y de las respectivas celebraciones, me di cuenta que realmente no hay ninguna crisis, al contrario, hay mucho que agradecer, hay muchas lecciones, muchas ganas de seguir con esta aventura llamada vida. Y aquí les comparto un poco:


1. La vida es muy corta como para estresarnos por todo. Recordemos aquella frase que nos dice que nada dura para siempre, recordemos que tenemos siempre la habilidad de salir adelante y de vencer cualquier obstáculo que se nos presente, si sabemos tomar las mejores decisiones. 

2. Nuestros mejores amigos no nos van a aplaudir todo lo que hacemos siempre. Una característica fundamental de los mejores amigos es que nos apoyan en todas nuestras decisiones, por supuesto, pero también nos dan consejos que necesitamos aunque no los queramos escuchar, nos jalan las orejas cuando saben que estamos cometiendo un error y nos recuerdan por qué valemos la pena. 

3. Todo lo que hacemos en esta vida tiene una consecuencia. A muchas de esas consecuencias les llamamos aprendizajes, obviamente. Pero pensar dos veces antes de actuar nunca está de más. 

4. Amarnos a nosotros mismos no siempre es fácil pero sí esencial. No podemos pedir que alguien nos ame, si nosotros no sabemos hacerlo primero. Conocer qué nos da valor, también nos ayuda a tomar mejores decisiones para nuestra vida. Sí, este aprendizaje es super nuevo para mí pero me ha servido demasiado a ser cada día más feliz. 

5. Si alguien nos hace sentir como que no valemos lo suficiente, no lo necesitamos en nuestra vida. Esto aplica a amigos, parejas, incluso a la gente que seguimos en social media. 

6. No siempre tenemos los mejores gustos al momento de elegir una pareja. Eso no es malo, lo malo es no darse cuenta y quedarse estancado en un patrón de personalidades que no nos aportan nada y no nos ayudan a crecer. 

7. Todos tenemos un lado raro y todos tenemos un tornillo medio zafado. Y es bonito. Y está bien. 

8. Buscar la aprobación de los demás nos puede matar, literalmente. No dejemos de comer, ni dejemos de vivir por buscar un "ok" de gente que ni siquiera es fundamental para nuestra vida. 

9. El dinero va y viene, sí. Y luego de haber pagado nuestras cuentas y nuestras deudas (porque eso es lo principal), no tiene nada de malo en gastar algo para nosotros. Al fin y al cabo, para eso trabajamos. 

10. Buscar un trabajo solo para pagar cuentas nunca nos dará una felicidad completa ni un sentimiento de logro. Lo más hermoso de la vida es trabajar en lo que nos apasiona, lo que nos llama, lo que nos llena. Vocación se llama. 

11.  Las mejores cosas siempre cuestan más. Siento que esto es una ley de vida que nos permite aprender a apreciar lo que tenemos. ¿Queremos un buen trabajo? Requiere esfuerzo. ¿Queremos un cuerpo increíble? Requiere esfuerzo. ¿Queremos una relación bonita y funcional? Ahí sí no sé qué decirles, pero seguro también requiere esfuerzo. Y así.

12. Llegar a los 30 años soltera, sin hijos y muchas veces sin idea de qué se quiere o se espera de la vida no está mal. Cada quien va a su propio ritmo. 

13. No todas las amistades están hechas para permanecer durante toda la vida. Muchas se quedan con nosotros hasta que aprendemos lo que tenían que enseñarnos, ya sea por grandes momentos compartidos, por sabias palabras o por dolorosas decepciones... o por todo lo anterior junto. 

14. Aprender a "leer" las intenciones que los demás tienen con nosotros nos puede ayudar a evitarnos muchos problemas y futuras decepciones. Muchas veces, esto se puede lograr con ese sexto sentido al que llamamos "intuición"; si algo no se siente del todo bien con alguien, lo más seguro es que esa persona no es la correcta para nosotros en ese momento.   

15. Creo firmemente que las personas malas no existen. Existen malas circunstancias, malas decisiones, malos ejemplos, malos entendidos, malas enseñanzas, malos ambientes, malas situaciones, intenciones mal dirigidas, etc., pero siempre tiene que haber algo bueno dentro de todos. 

16. Cuidar de nosotros mismos es un pasito más a la felicidad. Y me refiero a cuidarnos física, sentimental, emocional, psicológica y espiritualmente. Cuesta mucho encontrar un balance entre todos nuestros aspectos y nuestras facetas pero no es imposible (espero).

17. A veces no nos damos cuenta, pero somos inspiración para alguien más. Puede que en este momento no lo sepamos, pero hay alguien por ahí queriendo ser como nosotros. Dejemos que sea por las razones correctas. ;)

18. "La venganza nunca es buena, mata el alma y la envenena." Y es cierto, porque vivir pendiente de alguien que nos hizo daño, buscando que algo le pase o buscando hacerle algo, nos daña más a nosotros que a ellos. Y, realmente, vivir con sed de venganza y con odio en el corazón no borra lo que nos hayan hecho, no desaparece de nuestras vidas. Pero sí podemos buscar superarlo cada día y aprender de eso. 

19. Todos, hombres y mujeres igual, vamos a besar sapos o ranas antes de encontrar a lo que muchos llamamos "el amor de la vida". De todos los sapos o ranas aprenderemos a saber qué queremos (o qué no) de alguien. 

20. Siempre es bueno tener motivaciones. Tipo "yo quisiera tener el cuerpo de P!nk" y así, pero también es bueno tener presente que nunca nos vamos a ver como alguien más. Por eso somos únicos e irrepetibles. Podemos aceptarnos, abrazarnos y amarnos tal y como somos.

21. Cumplir años es de lo más alegre que hay en el mundo. La edad es solo un número pero la vida es muchísimo más que eso y debemos aprender a estar agradecidos por todas las lecciones que cada año nos deja. 

22. Quedarse callado y no discutir a veces es la mejor opción. Hay situaciones que no valen tanto la pena como para herir susceptibilidades o dañar una bonita amistad. 

23. Hay personas que valen la vida entera y si tenemos a esas personas iluminando nuestras vida, debemos saber apreciarlas y no asumir que siempre estarán ahí para nosotros. Saber agradecer por la presencia y la luz de las personas que le dan un toque especial a nuestros días, es esencial.

24. Nuestra familia no es perfecta, al igual que nosotros, todos somos humanos imperfectos. En todas las familias existen conflictos y diferencias, pero la unión siempre es más importante. Aprendamos a perdonar las ofensas, a resolver los problemas, a respetar las diferencias y amar eso que hace especial a todos y cada uno de ellos.

25. Comer cereal (mejor si es Choco Krispis con leche fría) es aceptable a cualquier hora. Dejemos que ese niño interior siempre siga vivo.

26. Ser sensible no es algo malo. Al contrario, tener la habilidad de sentir todo con tanta intensidad le da un sentido increíble a la vida. Ojo, que una cosa es ser sensible o susceptible y otra muy diferente es querer pasar por víctima siempre.

27. Los mejores consejos nos lo da siempre nuestra mamá. Ese ser increíble que nos dio la vida y que, tengamos la edad que tengamos, nos cuida, nos protege y siempre está dispuesta a tendernos una mano. Ese ser tan increíble, siempre va a querer lo mejor para nosotros y es por eso, que sus consejos siempre son acertados, desinteresados y llenos del amor más puro del mundo.

28. Saber sonreír aun cuando estamos tristes no significa que seamos hipócritas o que escondamos nuestros verdaderos sentimientos. A veces sonreímos siempre porque sabemos que estamos luchando por salir adelante.

29. Todo tiene su tiempo y su lugar. Querer adelantarnos a situaciones que aún no nos tocan vivir puede llevarnos a decepciones y frustraciones que tampoco necesitamos.

30. Esta lección la dejé de último porque ha sido la más importante para mí. Más que una lección, es una afirmación de vida: Dios es el centro de mi vida. Sentirme cerca de Él me da paz, me hace amar con más profundidad a mis amigos y familia, le da ha dado un sentido totalmente nuevo a mi pequeña existencia.

BONUS: Les prometo que el Vick's Vaporub sí es bueno para TODO.





Joyce, la amargada. ✌😎

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. Si uno se enfoca en la vida como simples números es lo que mata la esencia de vivir. Si sólo te fijás en cuantos años tenés y no en lo que has hecho en tu vida no es bueno, o en que tanto dinero ganás y no en lo que has logrado con ese dinero, etc. Es difícil encontrarle el sentido a la vida fuera de tener una familia y un trabajo, si uno no persigue algo para uno mismo es como estar muerto no importa la edad que uno tenga. Lo importante es ser realista y honesto con uno mismo, tragarse y aprender de los errores y seguir adelante, No importa lo mal que esté el momento porque por experiencia se que ni lo peor ni lo mejir del mundo dura para siempre, ni el amor ni el desamor, ni la depresión ni la alegría. Por lo regular los malos momentos son los que nos marcan más porque uno valora un poco mas lo que ha perdido a lo que se gana en la vida... es raro pero es así (o al menos así lo siento yo). Escribir ayuda a aclarar las ideas, yo tengo un blog que no creo que lo lea alguien jajajaja pero la verdad es para mí mismo pero si le sirve a alguien pues que bien. Saludos y bienvenida a los 30's!!!!

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